Parpadear es clave para una buena salud visual a la hora de dedicarse a la lectura. Cuando nos concentramos en esta actividad provocamos que el parpadeo sea menor, y esto conlleva sequedad y mala calidad de la visión. Por esta razón es recomendable no dejar de hacerlo o incluso recurrir a lágrimas artificiales si se tienen los ojos muy secos. Para una buena lectura, además, es fundamental disponer de una luz apropiada, mejor si es lateral, así como guardar una distancia mínima con el libro (equivalente a la medida del antebrazo).

Parpadear es clave para una buena salud visual a la hora de dedicarse a la lectura.
Cuando nos concentramos en esta actividad provocamos que el parpadeo sea menor, y esto conlleva sequedad y mala calidad de la visión. Por esta razón es recomendable no dejar de hacerlo o incluso recurrir a lágrimas artificiales si se tienen los ojos muy secos.
Para una buena lectura, además, es fundamental disponer de una luz apropiada, mejor si es lateral, así como guardar una distancia mínima con el libro (equivalente a la medida del antebrazo).