¿Qué hacer cuando se nos mete algo en el ojo?
A la mayoría de las personas en alguna ocasión se nos ha introducido algo en el ojo causándonos picor, escozor, irritación, lagrimeo y hasta visión borrosa o dolor intenso. ¿Qué hacer cuando se nos mete algo en el ojo? Esta es una de las preguntas que oímos frecuentemente en nuestra consulta. Evidentemente aunque todo depende de cada caso específico, en el siguiente post os contamos algunos consejos de cómo proceder de manera sencilla para evitar posibles daños oculares o que cualquier lesión que se pueda producir no empeore.
Lo primero y más importante que debemos saber es que aunque el instinto natural cuando sentimos cualquier molestia en los ojos es frotarnos, esto resulta perjudicial, ya que al no saber el motivo de dicha molestia, en el caso de que se nos haya introducido un elemento extraño este puede provocar una infección ocular e incluso abrasiones corneales.
¿Qué objetos, elementos o productos pueden introducirse en los ojos y provocarnos molestias o alguna lesión?
¿Qué podemos hacer?
Si nos entra algo en el ojo provocado por polvo, detritus, arenilla, una pestaña o algún elemento semejante, maquillajes o líquidos, lo principal es conservar la tranquilidad y como hemos comentado no frotar los ojos.
Partimos de la base de que el parpadeo y el lagrimeo es la defensa que utilizan nuestros ojos para eliminar y expulsar de manera natural y por si mismos cualquier partícula que se nos pueda introducir en el ojo. Si esto sucede el ojo produciría un exceso de lágrima para limpiar la zona ocular.
Si de manera natural el objeto sigue en el ojo procederemos a intentar localizar y lavar el ojo nosotros mismos o con ayuda de alguien. Antes nos lavaremos bien las manos con agua y jabón y nos situaremos en una zona bien iluminada para examinar mejor la superficie ocular.
Se observará la zona ocular abriendo bien los ojos para facilitar la búsqueda del objeto mirando arriba y abajo y de izquierda a derecha.
Si localizamos el cuerpo extraño procederemos a intentar sacar el objeto delicadamente con una gasa estéril o algodón higiénico si aparentemente consideramos que es posible la extracción sencilla del mismo.
Con suero fisiológico ayudaremos a enjuagar y limpiar la zona del ojo mediante un preciso lavado ocular para intentar expulsar el cuerpo extraño. Con esto conservaremos no solo los ojos limpios si no que podremos evitar irritaciones o posibles infecciones. También puede ayudarnos a la limpieza de la superficie ocular la lágrima artificial aunque resulta un poco más espesa.
En el caso de que nos haya caído algún producto químico, siempre es mejor acudir a un centro médico de urgencias o al especialista, y antes lavar los ojos con suero fisiológico y en su defecto con agua limpia abundante durante al menos 10 minutos para diluir el producto, ya que es esencial que el producto este en contacto con el ojo el mínimo tiempo posible para que así se normalice el pH.
Es importante saber de qué producto químico se trata para poder trasmitirlo al especialista o centro médico correspondiente y que tomen las medidas convenientes en cada caso.
Para facilitar el lavado, meterse en la ducha y dejar que el chorro de agua suave caiga sobre la frente manteniendo el ojo dañado abierto y mirando hacia un costado, es una buena opción si estamos solos y no tenemos ayuda.
También acudiremos al especialista o centro médico si el objeto es puntiagudo o afilado que se puedan incrustar en el ojo, en ningún caso trataremos de sacarlo por ti mismo.
¿Qué no debemos hacer?
Lo principal y como hemos comentado anteriormente no debemos ejercer presión ni frotarnos los ojos
Por ningún concepto debemos auto medicarnos
Nunca trates de retirar un cuerpo extraño incrustado o clavado en la superficie ocular
¿En qué momento debemos acudir al oftalmólogo?
Acudiremos al oftalmólogo en los siguientes casos:
Si seguimos notando molestias a pesar de haber limpiado el ojo o extraído algún cuerpo extraño.
Si no ha sido posible extraer el objeto con una sencilla irrigación y limpieza ocular o si sigue incrustado en la superficie ocular.
Si notamos dolor, sensibilidad a la luz, sensación de arenilla, sequedad, irritación o visión irregular una vez transcurridas 24 horas tras extraer el cuerpo extraño. No debemos olvidar que cualquier cuerpo extraño puedo erosionar el ojo.
En el caso de que el producto que nos haya caído en el ojo sea un producto químico.
Todas las posibles alteraciones o señales descritas en el anterior post son exclusivamente para referencia general y no están detallados todos los síntomas referidos. Si notamos algún signo de padecer alguna patología de carácter visual la recomendación es consultar con el oftalmólogo.