lentillas con protección solar

¿Sabías que existen las lentillas con protección solar?

A menudo pensamos que si llevamos una gafa de sol corriente puesta ya estamos protegidos de las radiaciones solares, pero la realidad es que no se obtiene una protección ocular adecuada y eficaz en todas las estaciones del año ya que las gafas de sol normales solo consiguen un cierto nivel de protección UV y cabe destacar que los rayos pueden penetrar a nuestros ojos a través de los laterales de las gafas. Hay gafas que no solo no filtran las radiaciones solares si no que pueden ser perjudiciales y provocar daños definitivos, un filtro solar escogido equivocadamente puede ser muy nocivo.

Día a día estamos expuestos al sol durante muchas horas, este, añade a nuestra salud beneficios pero si pasamos más tiempo de lo normal al sol y sin protegernos debidamente, nuestra piel y nuestros ojos pueden sufrir trastornos altamente nocivos.

Tanto al aire libre como en sitios cerrados, las radiaciones solares nos perjudican a cada instante. Muy a menudo sometemos a nuestro sistema visual a largas y abundantes horas de exposición al sol. La luz ultravioleta y la infrarroja pueden ser muy dañinas y crean las peores alteraciones e impacto a nivel ocular, por eso los protectores solares en la actualidad en la mayoría de los casos utilizan esta doble protección.

La radiación ultravioleta (UV) provoca lesiones oculares después de una fase latente, por eso los síntomas usualmente no son inminentes, aparecen tras una acumulación de la radiación al haber estado expuestos durante un periodo de tiempo. La radiación infrarroja (IR) es capaz de provocar daños térmicos que son repentinos, apareciendo sus síntomas rápidamente tras la exposición.

Sabemos que la radiación infrarroja que nos llega en forma de calor ocasiona pérdidas de colágeno y arrugas, en especial en el contorno de los ojos. Los infrarrojos produce en nuestros ojos sequedad y genera problemas oculares como la aceleración de las cataratas, pequeñas lesiones, despigmentación, quemaduras… la mejor manera de contener todos estos problemas oculares es protegiendo nuestros ojos de todas la radiaciones solares, del infrarrojo y el UV rayos ultravioleta, y para eso existen las lentillas con protección.

¿Para quién es más necesaria la protección solar en nuestros ojos?

Usualmente la protección contra las radiaciones es imprescindible mientras que estemos expuestos a cualquier clase de radiación, pero es fundamentalmente primordial en casos de riesgo como los que describimos a continuación:

¿Cómo son las lentillas con protección solar?

Las lentes de contacto comunes y bien ajustadas recubren nuestra cornea y parte de la esclera. Si le incorporamos un filtro UV contribuirá a su defensa y la del interior del ojo de la incidencia de los rayos UV directos y reflejados.

A día de hoy los filtros en tecnología de vanguardia llevan en su composición grandes evoluciones comparado con una gafa de sol común. Esta nueva tecnología se basa en los requisitos visuales y el uso que se le da en cada caso. Tienen la particularidad de posibilitar la emisión de la luz visible sin alterar los colores suprimiendo los ultravioletas y la luz azul. 

Las lentes polarizadas de las gafas de sol tienen también otro tipo de filtro solar que corrigen los problemas de deslumbramiento, los ojos enfocaran mejor y más pronto aumentando la apreciación del contraste y del color natural.

También existen filtros terapéuticos para trastornos oculares en particular que pueden ser hipersensibles que deberán ser recetados por el especialista.

En todos los casos los especialistas aconsejan la obtención de toda clase de filtros o lentes oftálmicas bajo la supervisión y receta de un profesional y en establecimientos sanitarios adecuados, homologados y controlados.

¿Entonces, cuál es la mejor manera de proteger los ojos de los rayos UV?

Utilizar filtros UV para evitar que los rayos dañinos penetren en nuestros ojos es la mejor manera de proteger nuestros ojos con las lesiones que pueden producirnos los rayos UV. Para ello las gafas y las lentillas pueden integrar y agregar protección UV. 

Generalmente las lentillas traen integrados filtros que bloquean los rayos UV entre sus componentes, esto conlleva a estar protegidos todo el tiempo y no solo en días con mucho sol o en época veraniega.

Llevando solamente una gafa de sol, no se logra bloquear todos los rayos UV que inciden en nuestros ojos, ya que como ya hemos comentado la luz del sol es capaz de introducirse por la parte lateral de nuestras gafas. Las lentillas que traen incorporados bloqueadores de rayos UV al final lo que nos da es un garantía de seguridad y defensa complementaria.

A la hora de elegir unas gafas de sol adecuadas y eficaces debemos tener en cuenta que hagan la función de bloqueo de los rayos UVA y UVB, en el mercado existen gafas de sol que poseen la misma cota de protección. Si la gafa es más bien grande y cercana a los ojos ayudara a que los rayos solares no incidan en nuestros ojos a través de los laterales de las gafas.

Los rayos solares son aún más potentes cuando la luz es reflejada, como cuando estamos en la nieve o en el agua, esta luz reflejada puede llegar a provocar quemaduras en nuestros ojos. Debemos evitar sobre todo la exposición en las horas en las que la luz solar es más intensa ya que en este tiempo los rayos ultravioleta son más peligroso. En este caso son más adecuadas las lentes polarizadas.

Una buena dieta rica en luteína refuerza la protección ocular actuando como antioxidante para la conservación de las células e impidiendo que la luz azul nociva consiga llegar al tejido posterior de la retine y ocasione alguna lesión.

Lo que sí es importante y debemos tener muy en cuenta es que las lentillas no reemplazan las gafas de sol a la hora de impedir que los rayos UV incidan en nuestros ojos porque en realidad no recubren totalmente los ojos y la zona periférica. 

Todas las posibles alteraciones o señales descritas en el anterior post son exclusivamente para referencia general y no están detallados todos los síntomas referidos. Si notamos algún signo de padecer alguna patología de carácter visual la recomendación es consultar con el oftalmólogo.